sábado, 17 de julio de 2010

¿Qué es peor que un dolor de muelas?

No pude dormir en toda la noche, el maldito dolor de muela no se iba, fue tan desesperante hacer de todo y que nada funcionara, al final amanecio y pude ir a comprar ketorolaco, eso sin duda no fallaria; y en efecto calmo mi dolor y pude descansar. Seis horas después desperté con una debilidad y unas ganas de llorar, ya sin dolor de muelas pero con otro dolor que asi me tome 6 mil pastillas de ketorolaco no se va. Es el dolor de mi corazón. Se me apachurra, aunque yo quiera ser fuerte hay días que no puedo más, yo lo sé  y lo reitero, no nací para este tipo de relaciones sufro demasiado y ése no debería ser el objetivo en el amor, sí, dolor y sacrificio representan un amor verdadero, pero la felicidad es quien juega el papel principal y ahora mismo yo no la estoy sintiendo. Tengo fé, esperanza, y sobre todo amor, pero hay dias como hoy que mis fuerzas se acaban que no tengo que hacer ningún esfuerzo por llorar, mis lagrimas brotan solas y no paran de caer. Ya no sé a quien suplicar para que este proceso termine pronto, pero mientras haya alguien a quien rezarle, lo seguiré haciendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario